Geografía

 

La Región de los Ríos está dominada por los valles de la Depresión Intermedia, interrumpidos apenas por la Cordillera de la Costa, que en la zona alcanza baja altura y es denominada como Cordillera Pelada, lo que permite el amplio desarrollo de la agricultura y de la ganadería. Los Andes mantiene su característico vulcanismo con una altitud que supera los 2.000 msnm, destacando los volcanes Villarica (perteneciente a la región de la Araucanía) (2.814) en el límite norte y el Mocho-Choshuenco (2.422).

Una de las principales características de la geografía corresponde a los cursos hidrográficos. Dos cuencas dominan la región: la del Río Valdivia y la del Río Bueno. En ambos casos, los ríos se originan en la zona cordillerana y, debido a la acumulación de morrenas de origen glacial que han detenido el paso de las aguas, diversos Lagos se han formado. En el caso del río Valdivia, éste se origina en el lago argentino Lácar cuyas aguas cruzan la frontera y dan forma a los Siete Lagos, un conjunto en el que destacan el Panguipulli, el Calafquén y el Riñihue; desde este último, las aguas bajan por el Río San Pedro y el Calle-Calle, hasta que sus aguas se juntan con las del Río Cruces para formar el Valdivia, el cual desemboca en la bahía de Corral. En el caso del río Bueno, es el Lago Ranco el que da vida a su cauce.

La geografía de la Región ha dado vida a diversos ecosistemas, como el Bosque Valdiviano especialmente la zona costera y que se caracteriza por la presencia de Alerces. Por otro lado, el Terremoto de 1960 que cambió gran parte del entorno regional provocó la inundación de zonas fértiles por cauces fluviales, generando grandes humedales como el del Santuario de la Naturaleza Carlos Andwanter, hogar de diversas especies de fauna como el Cisne de Cuello Negro(actualmente la población de cisnes es bajísima producto de su muerte masiva, el tema es polémico, indicándose como culpable a la industria de la celulosa).

El clima de la Región es templado continental húmedo, con una temperatura promedio de 11 °C con una baja oscilación térmica en la costa producto de la influencia maritima. Aunque en invierno hay temperaturas bajo cero. Las precipitaciones son realmente considerables y en la zona costera superan anualmente los 2.000 mm de agua caída, durante todo el año y principalmente durante los meses de invierno, lo que la convierte en una de las zonas más lluviosas del país.

Si bien las variaciones de relieve no son suficientes para producir variaciones significativas en la distribución de las temperaturas, sí generan diferencias en los montos de las precipitaciones, las que además se ven influenciadas por la altura y la latitud. En Valdivia se superan los 2.400 mm; descienden a alrededor de 1.300 mm en la depresión intermedia (Paillaco, La Unión, Río Bueno).